Hojaldre clásico con compota de calabaza y jengibre

Para preparar los hojaldres clásicos con compota de calabaza y jengibre, comienza quitando la piel de la calabaza con un cuchillo 1 y corta la pulpa en pequeños cubos 2. En una sartén antiadherente calienta el aceite de oliva virgen extra y sofríe la chalota picada, luego añade la calabaza en trozos 3 y déjala dorar a fuego medio durante unos diez minutos.

Añade el jengibre pelado y en trozos y las ramitas de romero (4-5). Deja que tome sabor durante unos segundos y luego añade el vino blanco 6 y lleva a cocción la calabaza, añadiendo un poco de agua caliente si es necesario.

Tritura la mitad de la calabaza 7 hasta obtener una crema espesa y transfiérela a una manga pastelera. Mientras tanto, corta las lonchas de panceta ahumada en rectángulos y doralas durante unos segundos en una sartén antiadherente 8 para que se vuelvan crujientes. Monta el aperitivo poniendo en cada hojaldre un poco de compota de calabaza 9, unos dados de calabaza, una tira de panceta ahumada y unas agujas de romero. ¡Aquí tienes listos los hojaldres clásicos con compota de calabaza y jengibre!