Pollo al verde

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PRESENTACIÓN

El pollo al verde es un segundo plato delicioso y para disfrutar por completo. La cobertura verde que cubre los diferentes cortes de pollo y da nombre a esta receta, se obtiene de forma sencilla y rápida, aprovechando el sabor y las propiedades de muchas hierbas aromáticas.
Una vez picadas finamente las acelgas, el perejil, el cebollino, el romero, la salvia, la mejorana y el tomillo, basta con enharinar las distintas piezas de pollo que hayas cortado y deshuesado y luego pasarlas por esta mezcla verde y fragante.
Para mantener la suavidad del pollo durante la cocción en el horno, puedes rociar todo con un poco de leche o caldo antes de hornear. El resultado será un plato suculento, sabroso y aromático: la mezcla de sabores del picadillo verde, de hecho, realza el sabor más neutro y delicado de la carne blanca, y forma un binomio aún más exitoso con su tierna consistencia. Preparando el pollo al verde saldrás de los esquemas habituales y llevarás a la mesa un derroche de color y sabor, solo te queda prepararlo y saborearlo completamente, ¡hasta el último aroma!

INGREDIENTES
Pollo 1 kg
Acelgas 200 g
Perejil 20 g
Harina 00 100 g
Leche entera 90 ml
Chalote 1
Cebollino 6 - hilos
Salvia 5 hojas
Mejorana 5 ramitas
Tomillo 4 ramitas
Romero 2 ramitas
Ajo 1
Aceite de oliva virgen extra cantidad suficiente
Sal fina cantidad suficiente
Pimienta negra cantidad suficiente

Preparación

Para preparar el pollo al verde, empieza limpiando las acelgas: lávalas bajo agua corriente 1 y colócalas sobre una tabla de cortar, luego elimina los tallos 2. Después, deshoja todas las hierbas aromáticas y transfiérelas a algunos recipientes pequeños 3.

Coloca las acelgas limpias en una batidora 4 y mezcla hasta picarlas finamente 5. Ahora añade las diversas hierbas aromáticas, comenzando por el perejil 6.

Continúa añadiendo los tallos de cebollino 7, las hojas de salvia 8 y las agujas de romero 9.

Añade la mejorana 10, las hojitas de tomillo 11 y luego mezcla nuevamente todo hasta obtener una mezcla uniforme y bien picada 12. Transfiérela a un plato y reserva.

En este punto continúa con la limpieza y el corte del pollo: coloca el pollo entero sobre una tabla de cortar y comienza cortando las alas 13, procede separando los muslos 14 y finalmente divide y deshuésa la pechuga, asegurándote de haber eliminado el hueso en forma de Y y los demás trozos de cartílago 15. También puedes utilizar el pollo ya cortado y deshuesado que encuentras en el supermercado.

Pela las distintas piezas de pollo que has cortado 16 y luego enharínalas 17. Una vez enharinadas, toma la mezcla de acelgas y hierbas aromáticas que habías reservado y pasa las piezas de pollo hasta empanarlas por ambos lados 18.

Vierte un chorrito de aceite en una bandeja amplia y coloca un diente de ajo pelado y cortado por la mitad y añade también la chalota que ya has picado finamente 19. Ahora coloca las piezas de pollo enharinadas y empanadas en la bandeja 20 y rocíalas con la leche para ablandarlas y que no se sequen durante la cocción 21. Puedes sustituir la leche también por caldo vegetal, descubre cómo prepararlo consultando nuestra Escuela de cocina:Caldo de verduras.

Sala y pimienta al gusto 22 y hornea en horno estático ya caliente a 180° durante 35-40 minutos 23, si usas el horno ventilado, cuece a 160° durante 25/30 minutos. Cuando el pollo esté ligeramente dorado en la superficie y el jugo se haya espesado un poco 24, tu pollo al verde está listo para servirse bien caliente, acompañado de una guarnición de patatas!

Conservación

El pollo al verde puede conservarse en la nevera bien cubierto con film transparente o en un recipiente hermético durante un máximo de 2 días. Si usas un pollo fresco y no descongelado, puedes congelar el pollo al verde ya empanado en las bolsas de congelación adecuadas y luego descongelarlo a temperatura ambiente o en la nevera y luego gratinarlo en el horno.

Consejo

Donde hay algo verde (si no son acelgas no hay problema: utiliza espinacas), suele aparecer también un poco de panceta :) : en esta receta no está porque el pollo es delicioso así, al natural, pero si la echas de menos añádela sin remordimientos antes de servir, acompañando tal vez con una guarnición de patatas. Más bien, si prefieres evitar la leche, utiliza en su lugar caldo de verduras.

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.